El otro día me encontré con mi compañera Blasca Blazquitia.
"Cuánto tiempo, gañán", me dijo.
"Tu puta madre", le contesté.
Pero
lo cierto que soy un gañán, pues a fin de cuentas, pese a que intento
que la coeducación entre en mi cerebro y me reeduco en un sinpar de
lecturas codialógicas conmigo mismo, no me puedo resistir a eso de
"piensa mal y acertarás". ¿Y a qué viene toda esta parida, muchachada?
Pues el tema es que Blasca me contó su última aventura, y yo pensé mal
cuál gañán.
Andaba
la presunta funcionaria (yo no he visto el título) en su instituto
moviéndose en el plano profesional y ejerciendo en "se me ha olvidao
esto bajo a por ello y ya de paso aprovecho para ir al servicio que
llevo dos horas aguantándome pero también miro en el ordenador lo otro
que a ver qué le pasa a la china y el otro hoy venía un poco apagao a
ver qué le saco y ya me subo los exámenes de aquello" que es mayormente a
lo que se dedica un buen docente con inteligencia emocional adecuada.
Que
sería más facil con una moto o uno de esos cacharros de dos ruedas de
poli de centro comercial, no cabe duda, pero como hay muchas escaleras,
igual no. ¿Que por qué tienen vallas los colegios? Vamos, vamos, esa es
una pregunta de noruegos...
Pasando
a unos 12 km/h por el pasillo de la planta baja entre las escaleras a
la sala profesores a los servicios, ya al revolver la esquina, pues
Blasca ve al director del centro charlando con el bedel, y se pregunta
"¿Qué hace aquí el director? ¿Qué hace aquí el director?" y se lo
pregunta porque son las 21:00 horas zulú del viernes y a ella le queda
su última clase de economía y las movidas de dirección son de mañana y
casi nunca los viernes a las 21:00.
Pasa
embalado al lado del director, pasa embalada por el pasillo y llega a
la puerta del baño y la abre de golpe.¡Zaaaas! ¡Sustaco! Dos limpiadoras
chillando.
¿Pero
qué es esto? ¿Una peli de Berlanga? ¿De Buñuel? ¿American Horror
History Las Tendillas? ¿Donde está el carrito de limpiar?¿Por qué no se
salen? Si ni están fumando. ¿Por qué se han asustao? Ay, que me meo.
Total
que las limpiadoras le dejan paso franco y Blasca hace lo suyo y a
salir zumbando que si los apuntes que si los exámenes que si la china.
¡Los chinos nos comen! Nos comen los chinos, niño. Se sube para su clase
de economía y atiende a un alumno ¡uno solo y no lo larga! hasta las
22:00 de la noche.
Dialogando
con ella mi conclusión fue "limpiadoras lesbianas" pero la realidad y
la aplicación del método deductivo es diferente. Se podría concluir cual
Sherlock Holmes que el director estaba allí para controlar tanto a los
profes que largan a sus alumnos y se escaquean a última hora, malditos
ellos que desprestigian a tantos otros que atienden a sus alumnos como a
sus propios hijos, tanto para controlar a las limpiadoras y es por ello
que las limpiadoras se escondieron en el único sitio en el que el
director, siendo de género masculino, no pudiere persiguirlas
coeducativamente, el servicio de señoras.
Eso
podría deducirse con una infabilidad del 99,8%, sí. Pero yo, gañán de
mí, dado que no entra dentro de mi labor profesional donde he de aplicar
métodos científicos y comprobados en vez de creencias, dado eso y lo
gañán y cateto que soy, teniendo pues libertad del plano profesional,
elegiré la opción de las "limpiadoras lesbianas".
Artículo dedicado a las limpiadoras que limpias y a los profes cuyos alumnos aprenden.
Max Powers.
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